La nostalgia entre suspiros se siente tan desesperante,
Es como el palpitar de una espina en tu corazón ya quebrado.
La tristeza se siente como el vacío extremo del olvido por quien sentías el más puro amor.
La soledad es el pago por la ingenuidad y la arrogancia.
Y aún así, nos permitimos soñar, creer y rehacer.
Mientras la luna siga su reinado,
Las almas lloraran por amor y reirán por dolor... la noche sólo nos trae consigo tristeza y llanto.
Tu quien deberías ser mi salvación,
Mi devota inspiración,
Tú quien puedes dar calma y fe,
Niña de bella sonrisa y rostro
Tú, quien con su mirada me da el más fino placer de creer y soñar.
Niña de esencia noble y tranquila,
Decidme donde está la llave que me permita adentrarme se tu jardín de sentimientos.
Hoy y está noche escribo para hacerte feliz,
Porque eres la musa que lleva mi mente al más bello paraíso de amor y pasión,
Tú mi campo Elíseo, mi jardín de rosas y esperanza.
Te quiero y te pienso.
Lamento de un Arlequín.
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