sábado, 5 de diciembre de 2015

Cuarta proclamación

Que he de decir, para que mis palabras se escuchen.
Que he de gritar, para que mis oídos sangren.

Si tan sólo el llanto que oculta este corazón, derramara todo el dolor...

He sentido el aire que respiras,
He visto lo que tu mirada refleja,
He olfateado el dulce aroma de tu ser,
Y aún así, no entiendo el amor que por tu he de sentir.

Vi como florecias al amanecer,
Desprendiendo tu aroma a mujer,
Un ser mágico y espectacular,
Que domaria mi alma con simpatía,
Vi como te ocultabas al inicio de la luz de luna,
La estrellas te iluminan y los astros se postran a tus pies,
La luna te sonríe y mi cuerpo se estremece,
Te escribo ésta noche, porque mi ser... así lo prefiere.

Danzando las estrellas, pido que bailes conmigo está pieza,
La sinfonía universal, nos hace brillar,
Sus melodías nos acercan y nos hacen suspirar,
Suspiros que conllevan al más bello pacto,
Acercando nuestros labios, al límite de rozarlos al beso anhelado,
Los dos cuerpos por fin se han fusionado.

Canta mi corazón al ritmo de tu pasión,
Entrelazamos nuestras manos, por fin eres mi amor!.

Lamento de un Arlequín

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